miércoles, septiembre 22, 2004

La Gala del Odio

¿Alguien vió el otro día la gala de presentación de la nueva programación de TVE? Una muestra inmejorable de lo que tiene que ser una televisión independiente, imparcial, sin influencias, en definitiva, una televisión progre, una televisión para todos. O eso era lo que se hartó de decir la prodigiosa directora de RTVE, Carmen Caffarel, de lo que sería la televisión pública en la nueva etapa post-franquista.

¿Ironía? Pues sí. Porque en lo que realmente se convirtió la gala fue en un lamentable mitin político anti-PP de la mano de los eruditos el Gran Wyoming y Rosa María Sardá, muy ingeniosos ellos haciendo referencia constantemente a la derrota del PP en las elecciones generales de una manera totalmente despreciable y miserable, llegándose a reir incluso del 11-M. Qué graciosos ellos! Cuánta simpatía, sí, sí.

Pues va a ser verdad que “otra televisión es posible”, como rezaba la promoción de la 'gala'. Sí, la televisión del rencor y la mezquindad.

Y mientras tanto, nuestro super presi ZaPatitos, desde Nueva York, no deja de regalarnos perlas como esta, en la que afirma que en la lucha contra el terrorismo es “mucho más efectiva” la “igualdad entre sexos” que la “fuerza militar”. Unas declaraciones verdaderamente afortunadas teniendo en cuenta que terroristas islamistas acaban de decapitar a los dos rehenes estadounidenses que llevaban secuestrados en Irak desde el pasado jueves...

Y de paso se le ocurre la genial idea de sugerir que "el terrorismo debe combatirse desde la legalidad internacional y la democracia", poniendo a España como un ejemplo... En fin, qué decir al respecto... Pues que ZetaPé podría haberse ahorrado estas palabras. España no es precisamente un modelo histórico de cómo se combate el terrorismo con las armas de la ley y la democracia. ¿Acaso a nuestro talentoso presi no le suenan de nada las siglas GAL? Sí hombre, el GAL, aquella organización terrorista financiada por el gobierno socialista con el dinero público para luchar contra ETA, llegando incluso a torturar y asesinar a 'presuntos etarras' que sólo se quedaron en presuntos...

En fin, que nuestro querido y sonriente ZaPe no deja de demostrarnos que el traje no es lo único que le viene grande.

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