Tengo un amigo nuevo

En los altavoces: Stone Temple Pilots - Interstate Love Song

En el post anterior decía que mi trabajo era el más inapetente, soporífero, tedioso y aburrido de este planeta llamado Tierra... qué mentiroso puedo llegar a ser, endevé! Sin ir más lejos (que la distancia me da vertigo), ayer fue uno de los días más divertidos de mi dilatada vida laboral. El caso es que me quedé yo de jefe en la oficina, más que nada porque el jefe de mi jefa estaba de vacaciones y mi jefa estuvo reunida todo el día Dios sabe dónde (o eso dijo ella, pero tenemos un pacto: yo no le pregunto a dónde se va de reuniones y ella no me pregunta qué hago yo en su ausencia). Y aprovechando esta coyuntura, entre el Petit (el informático de la empresa) y yo, en un plis plas, nos montamos una pedazo fiesta privada en mi oficina casi por inercia, como quien no quiere la cosa, y memorable, eso sí, digna de las más afamadas raves inglesas. Os podeis 'de' imaginar, sexo, drogas, hiphop y competiciones ilegales de patinete de dramáticas consecuencias: casi fallezco desangrado por el dedo gordo de mi mano derecha, es lo que tiene no controlar el giro a la izquierda, que estoy todavía en el nivel 'principiante'. Luego ya en la hora de la merienda, leyendo el periódico en una cafetería (omitiré el nombre para no hacer publicidad gratuita, el que se quiera anunciar en mi blog, que apoquine) me entero de que esa misma tarde va a estar el tito JoseMari (Aznar) en el Corte Inglés firmando libros. Acto seguido pongo en marcha toda la maquinaria. Telefoneo a mi padre para informarle del gran acontecimiento y pospongo todas las citas que tenía anotadas en mi agenda (osea, en vez de quedar con Jorge a las 16pm, quedamos a las 19.30pm). Y ahí estaba yo a las cuatro y media libro en mano (regalito de Raúl por mi cumpleaños) y más contento que unas castañuelas en la interminable cola del Corte, más larga que la Gran Muralla China, de hecho su figura se perdía en el horizonte, allí por donde camina el perro que Marta se imagina. Dos horas y media de espera, hasta que me toca el turno... Una conversación de lo más interesante, no la olvidaré jamas:

- Aznar: Sergio eres tú?
- Renko: sí, yo, soy yo.. Renk... estooo Sergio
- Aznar: y qué? cómo te trata la vida?
- Renko: hombre... bien, podría ir mejor, pero no me quejo
- Aznar: eso está bien, me alegro... y qué haces?
- Renko: estudio..
(silencio)
(sonrisas en Aznar)
(silencio)
- Renko: te lo juro
- Aznar: y qué estudias? (con cara de incredulidad)
- Renko: Empresariales en la UIB
(me firma el libro con dedicatoria)
- Aznar: bueno renk.. Sergio, encantado de haberte conocido, que te vaya muy bien
- Renko: gracias presidente!
(apretón de manos)

Y nada más girarme al despedirme del tito JoseMari me aborda un chica y me dice "disculpa...", y yo pues claro, siendo como soy una persona muy cortés, atenta y educada, le prestó atención pensando que me iba a pedir la hora o que le hiciera alguna foto... pero la tía me había engañado muy vílmente aprovechándose de mi inocencia juvenil, y me suelta (grabadora en mano): "tú como representante de la juventud española que ha crecido y madurado con el gobierno de Aznar en el poder, qué opinas sobre.....". No había pasado tanta vergüenza desde que tuve que exponer un proyecto en la universidad... nunca me habían entrevistado para la rádio en calidad de representante de las juventudes de este país, hasta pensaba que sería más doloroso (por eso de ser la primera vez)... Pero sobretodo por la mirada y el oído atento de mas de mil personas (o inclusive más) que estaban a mi alrededor en ese momento pendientes de mis respuestas, que yo esto de ser el centro de atención nunca lo he llevado bien, que soy muy tímido...

Por cierto, la dedicatoria es esta: A mi amigo Sergio Sanz (firma) 17/06/04. Osea, que he estado ocho años con un amigo en La Moncloa, y yo sin saberlo! Cachilamar!

PD: ya colgaré las fotos cuando revele el carrete :PP